...como dice el cántico, apriétense los dientes.
Santander y Granada, sorprendentemente rivales de nuestra Liga a los que hemos de doblegar OBLIGATORIAMENTE. No valdrá ni un punto ni tres ni cuatro. SOLO SEIS. Será difícil, pero ya que no se gana a los equipos grandes habrá que hacerlo a los pequeños. Hay que exigir motivación, intensidad y profesionalidad para doblegar a estos equipos que saldrán a vaciarse en el terreno de juego en la convicción de que se están enfrentando a un Grande de la Liga.
Es de esperar que el técnico esta vez alinee a los jugadores que están implicados y dispuestos a tirar del carro, porque bajo el amplio paraguas del grupo más de uno ya ha reconocido que no está dando el máximo rendimiento, y esto es verdaderamente preocupante ... Eso explica que no estemos más arriba, la actitud y a veces desgana con la que hacemos ascos a partes de partidos en los que esperamos que el rival se ponga por delante.
De la crítica sequia de goles ya se ha hablado y mucho. Parece que el paso de los días, semanas y sesiones de entrenamiento no sirven para llevar el acierto a nuestros delanteros.
Ambiente de gala ayer en el coliseo nervionense, en el ambiente la esperanza de encontrar al Sevilla de las grandes noches.
No pudo ser.